
Auténticas yemas de Santa Clara. De un sabor delicioso y auténtico. Huevo y azúcar como base principal, siguiendo la tradición, con una textura y aroma característico del auténtico producto de calidad, elaborando con la máxima virtud artesanal en el obrador de convento.
Conservar en lugar fresco y seco, y protegido de la luz.
Monasterio de La Purísima Concepción (Santa María). Siglo XVII. Marchena, Sevilla.